Consejos para conseguir el inquilino perfecto. SPOILER: No existe

La mayor preocupación que le surge a un propietario, ya sea a través de un profesional inmobiliario o de manera particular, cuando quiere alquilar su vivienda es la elección del inquilino.  Cómo elegirlo no es fácil.  Muchos tienden a buscarlo en el entorno cercano para tener referencias, pero esto no siempre puede dar buen resultado.

Partir de la idea de que el inquilino perfecto no existe es muy radical, por eso os damos una serie de recomendaciones para intentar orientar esta ardua búsqueda.

Si has decidido poner tu propiedad en alquiler hay que tener claro que cierto riesgo existe, pero, una vez valorado los pros y los contras hay que continuar.

Lo primero es asesorarte con un profesional del sector, explicándole todos los datos de la vivienda y las expectativas económicas. También puedes marcar los filtros que consideres oportunos, sugiriendo el perfil que más te interese, como pueden ser parejas, familias o estudiantes, etc… pero, a mayor número de filtros menos demanda tendrás.

Consejos para conseguir el inquilino perfecto

¿Qué debemos buscar?

Es importante la primera comunicación con el inquilino, donde ambas partes se hablen sin problemas y planteen lo que quieren y buscan.  Los acuerdos y negociaciones tienen que ser fluidas, por lo que hay que desconfiar de aquellos interesados que no faciliten las cosas y pongan pegas a todo lo que se les pide.  Esta primera impresión es crucial, aunque hay que entender que no es suficiente para llegar a conocer a una persona. La intuición es algo que no podemos dejar de lado, pudiendo influir en nuestra decisión.  La educación y la sinceridad son dos factores importantes.

La solvencia del inquilino es el punto que más preocupa a un propietario.  Por eso hay que informar al inquilino que tiene que acreditar ingresos aportando la documentación necesaria dependiendo de su situación laboral, como pueden ser últimas nóminas en caso de asalariados o declaración de la renta en caso de autónomos. En el 90% de los casos, ésta documentación será validada por un seguro de impago de rentas que garantizará la operación por los posibles problemas que pudieran surgir. También es interesante que se aporte la vida laboral, ya que esta muestra la estabilidad laboral.  Es preferible alguien que lleve varios años en el cotizando, que uno que acabe de empezar.

A veces no es fácil cumplir esta solvencia necesaria por lo que se pueden añadir garantías adicionales.  Legalmente no se pueden exigir más de dos meses de fianza, por lo que lo recomendable es que se aporte un avalista solidario, que garantice el cumplimiento de las obligaciones del arrendatario.  Mientras más aporten y más fácil sea esta gestión más confianza dará el inquilino.

Consejos para conseguir el inquilino perfecto

Otro punto que preocupa mucho a los propietarios es el cuidado de la vivienda.  Por eso hay que dejarlo claro desde el principio, que la vivienda se debe devolver en el mismo estado en que se entregó.

El contrato de arrendamiento es el documento oficial que va a fijar las condiciones del alquiler, por lo que tiene que estar actualizado a la normativa vigente, evitando cláusulas abusivas.  Es aquí donde hay que dejar redactar los puntos acordados, como el pago de los suministros, tasas o prohibiciones como puede ser la tenencia de animales.

Hay que desconfiar del inquilino perfecto, aquel que se quiere ganar pronto nuestra confianza y que presume de ser buen pagador.  Tampoco hay que confiar de aquellos que quieren pagar un año por adelantado, eso no nos asegura que puedan dejar de pagar después en cualquier momento.  Por eso acreditar la solvencia de manera previa a la firma del contrato es la principal recomendación, ya que es el único dato objetivo que vamos a tener de nuestros inquilinos y aunque la sensación que transmitan tenga peso, no dejará de ser una mera intuición, no un hecho.

“Nuestro ánimo se inclina a confiar en aquellos a quienes no conocemos por esta razón: porque todavía no nos han traicionado”
Samuel Johnson

Añadir comentario